La noticia conocida ayer sobre el decreto promulgado por Monseñor Asenjo en la Archidiócesis de Sevilla, protagonista de todos los medios de comunicación, pone por fin solución a la incomprensible actitud de los cofrades de cinco hermandades de la archidiócesis sevillana, dos en la localidad de Dos Hermanas y tres en la ciudad de Sevilla, que mantenían hasta la actualidad el veto a sus cofrades femeninas a participar en sus procesiones como nazarenas. Esta cofradías son El Silencio, Quinta Angustia y Santo Entierro en Sevilla, y Vera Cruz y Santo Entierro en Dos Hermanas.
Según hemos podido leer en la amplía información generada sobre esta noticia, los responsables de estas hermandades, en concreto las de Sevilla, habían solicitado al propio Arzobispo que promulgara un Decreto ordenando la admisión en igualdad del las cofrades, evitando con ello suscitar nuevas polémicas y la posible negación de los cabildos a aprobar algo que desde 1997 lleva solicitando la Iglesia a las hermandades y cofradías sevillanas.
La exhortación pastoral promulgada por Monseñor Amigo en el año 2001 fue también fue un gran paso dado por la Iglesia sevillana para que la gran mayoría de las hermandades de esa diócesis, a lo largo de casi una década, hayan modificado sus estatutos para incorporar a la mujer y la dejaran salir en las procesiones como nazarenas. Los casos más recientes en aprobar este cambio sucedieron la pasada Cuaresma en la que las Hermandades del Amor y Gran Poder modificaron sus reglar para admitir a sus hermanas en la Estación de Penitencia.
El decreto dice textualmente "Determinar la plena igualad de derechos entre los miembros de las Hermandades y Cofradías de la Archidiócesis, sin que sea posible discriminación alguna en razón de sexo, incluida la participación en la Estación de Penitencia como acto de culto externo", lo que significa también que queda una puerta abierta para que las cofrades de Sevilla puedan incorporarse a las procesiones como costaleras.
Es de esperar que la actuación del Arzobispo de Sevilla sirva de ejemplo en otras diócesis para que sus responsables obliguen a sus cofradías a no seguir discriminando a la mujer, como ocurre en el ámbito cofrade de la ciudad de Zamora.
El conocimiento de este Decreto ha tenido una especial repercusión en este ámbito cofrade, en el que significativamente se mantiene el veto a la mujer en una gran mayoría de sus hermandades y cofradías, El diario La Opinión de Zamora ha hecho eco de esta noticia, y también de la opinión respecto a la misma por parte de la Federación Nacional de Asociaciones Mujeres Cofrades. Esto son los enlaces a estas noticias:
Según hemos podido leer en la amplía información generada sobre esta noticia, los responsables de estas hermandades, en concreto las de Sevilla, habían solicitado al propio Arzobispo que promulgara un Decreto ordenando la admisión en igualdad del las cofrades, evitando con ello suscitar nuevas polémicas y la posible negación de los cabildos a aprobar algo que desde 1997 lleva solicitando la Iglesia a las hermandades y cofradías sevillanas.
La exhortación pastoral promulgada por Monseñor Amigo en el año 2001 fue también fue un gran paso dado por la Iglesia sevillana para que la gran mayoría de las hermandades de esa diócesis, a lo largo de casi una década, hayan modificado sus estatutos para incorporar a la mujer y la dejaran salir en las procesiones como nazarenas. Los casos más recientes en aprobar este cambio sucedieron la pasada Cuaresma en la que las Hermandades del Amor y Gran Poder modificaron sus reglar para admitir a sus hermanas en la Estación de Penitencia.
El decreto dice textualmente "Determinar la plena igualad de derechos entre los miembros de las Hermandades y Cofradías de la Archidiócesis, sin que sea posible discriminación alguna en razón de sexo, incluida la participación en la Estación de Penitencia como acto de culto externo", lo que significa también que queda una puerta abierta para que las cofrades de Sevilla puedan incorporarse a las procesiones como costaleras.
Es de esperar que la actuación del Arzobispo de Sevilla sirva de ejemplo en otras diócesis para que sus responsables obliguen a sus cofradías a no seguir discriminando a la mujer, como ocurre en el ámbito cofrade de la ciudad de Zamora.
El conocimiento de este Decreto ha tenido una especial repercusión en este ámbito cofrade, en el que significativamente se mantiene el veto a la mujer en una gran mayoría de sus hermandades y cofradías, El diario La Opinión de Zamora ha hecho eco de esta noticia, y también de la opinión respecto a la misma por parte de la Federación Nacional de Asociaciones Mujeres Cofrades. Esto son los enlaces a estas noticias:
Tercio Femenino de la Agrupación de San Juan Evangelista (Marrajos). Foto de la exposición 'Cofrades'. Autora María Dolores Vilar Albaladejo