La Semana Santa de Zamora ha dado un paso hacia la igualdad en sus procesiones. La mesa (trono), de la Virgen de las Espadas, imagen que llevaba cuarenta años sin procesionar en los cortejos penitenciales zamoranos, ha formado parte este año en la procesión de Viernes Santo, y lo ha hecho portada por un grupo de 18 portadores, hombres y mujeres, sin que esto haya supuesto ningún tipo de polémica.
Fotografía publicada en la Web La Opinión de Zamora, en el artículo Fría noche de espera
Es una lástima que en Cartagena algunos consideren que la participación mixta en nuestros tronos sería algo "ético y moralmente incorrecto". Quizá nosotros también tenemos mucho que aprender de los cofrades de otras ciudades, incluso de los de aquellas en las que la mujer aún sufre discriminación en sus cofradías, como en el caso de Zamora, que en esta ocasión ha dado una lección sobre la igualdad, y ha hecho realidad las acertadas palabras que nos reflejaron hace años los cofrades de Valladolid en su candidatura para optar al Premio PASOS: "Hombres y mujeres somos iguales ante El. Seámoslo también ante nosotros mismos"
Fotografía publicada en la Web La Opinión de Zamora, en el artículo Un paso hacia la igualdad